Este verano, las tradicionales chanclas de dedo, también conocidas como flip flops, han dejado de ser un calzado exclusivo para playas y piscinas para convertirse en un accesorio de lujo y estilo urbano. Según datos de plataformas de análisis de tendencias como Lyst y Trendanalytics, las búsquedas de chanclas de plataforma han registrado un crecimiento sin precedentes, situándolas entre el calzado más deseado de la temporada. Artistas y referentes de moda, como Dua Lipa, ya las incorporan en sus maletas de vacaciones, consolidando la tendencia a nivel global.
De lo hortera a lo icónico: la evolución de las flip flops
En las décadas de los 90 y 2000, las sandalias de plataforma solían verse como un complemento informal y, en ocasiones, se las asociaba con un estilo de mal gusto, usándose principalmente en situaciones de recreo. No obstante, una nueva interpretación de este tipo de calzado ha elevado su posición, haciéndolo un emblema de lujo accesible solo para algunos. Marcas como The Row, con diseños que pueden costar hasta 690 dólares, o ERL, con suelas que alcanzan los 20 centímetros, han transformado la simplicidad de las flip flops en un objeto codiciado. Este fenómeno fusiona el minimalismo de los 90 con el desenfreno de los 2000, atrayendo la nostalgia que explora la Generación Zeta en plataformas como TikTok.
La historia que respalda la tendencia
Las sandalias conocidas como chanclas han existido por miles de años. Ya en el antiguo Egipto, las personas de diversas clases usaban versiones hechas de papiro. Años después, las zōri japonesas dieron un giro a este calzado, utilizando suelas de paja o cuero sin tratar. Los soldados estadounidenses en Japón introdujeron la versión moderna de goma, llamada flip flop, al resto del mundo. En Brasil, la famosa marca Havaianas lanzó su versión icónica en 1962, convirtiendo un simple calzado en un emblema veraniego a nivel global. Hoy en día, se comercializan más de 230 millones de pares anualmente, y la empresa sigue viendo un crecimiento sostenido en sus ingresos gracias a la continua popularidad de este estilo de sandalia.
La opulencia invade las avenidas
En años recientes, las sandalias tipo chancla han hecho una aparición destacada en ambientes urbanos y en el ámbito de la alta moda. Desde eventos de gala hasta cenas exclusivas, este tipo de calzado ha demostrado su versatilidad. Se han observado diseños de Chanel, Alaïa, Prada y Sportmax integrados con atuendos elegantes, complementados con abrigos largos, chaquetas con estructura y vestidos que llegan por debajo de la rodilla. Colaboraciones exclusivas, como las realizadas por Dolce & Gabbana con Havaianas o las ediciones de Zara y Gimaguas, han alcanzado un éxito inmediato, agotándose en solo unas horas. Este fenómeno evidencia la adaptabilidad del calzado: un mismo diseño puede combinarse tanto con vestimenta minimalista como con outfits que cuestionan las normas tradicionales del lujo.
Aspectos de salud y mercado
Investigaciones de la Universidad de Auburn han señalado que el uso repetido de chanclas puede alterar la marcha y generar molestias en pies, tobillos y espalda. Aun así, esto no ha detenido la popularidad de las flip flops en el verano 2025. Polaris Market Research estima que el mercado global de chanclas alcanza un valor aproximado de 24 000 millones de dólares, consolidando su relevancia económica y cultural.
Un movimiento que está transformando la moda actual
Las chanclas de plataforma del verano 2025 no solo son un calzado: representan la fusión de historia, lujo y nostalgia. Desde sus orígenes faraónicos hasta su aparición en pasarelas internacionales, han demostrado una resiliencia que pocos accesorios pueden igualar. Este verano, las flip flops no son solo un símbolo de comodidad: son un referente de estilo, un testimonio del ciclo de la moda y una demostración de que la elegancia puede encontrarse en los elementos más simples y aparentemente cotidianos.